Las amenazas que recibió Sergio Massa y su familia no pasaron desapercibidas para la CGT, que rápidamente condenó las agresiones hacia el titular de la Cámara de Diputados y repudió «la violencia política».
Para la central obrera, en un documento que firman los secretarios generales Héctor Daer, Carlos Acuña y el secretario de Prensa y Comunicación Jorge Sola, «cuando el debate político se transforma en intolerancia y violencia, la política se degrada hasta desaparecer.
No debemos pasar por alto el cobarde ataque a las instituciones democráticas y en ese sentido el movimiento obrero se solidariza con el Compañero Sergio Massa y su familia».