La navidad de Luis

La navidad de Luis

Como dice el Luis de León Gieco: “Mi vida no es de navidad”. Es la consecuencia de las acciones políticas que ejecutan los que gobiernan cuando son insensibles a las necesidades del pueblo y endeudan al estado importándoles solo sus bolsillos.

Por Miguel Di Spalatro, especial para @políticaymedios

Señora, ¿cree que mi pobreza
llegará al final comiendo pan
el día de Navidad…?”  
León Gieco 

Desde hace 20 años el fantasma del 2001 sobrevuela diciembre. Legítimo en demandas insatisfechas y exaltado por la conveniencia de sectores de poder a los que no les conviene una democracia fuerte, la llegada de las fiestas de Navidad y Año Nuevo son fechas en las que se remueven rumores de saqueos y descontento social. 

A los agitadores políticos y mediáticos se opone el trabajo de las organizaciones sociales que cada día del año conviven con las necesidades de barrios y asentamientos. Mientras los dueños de la tierra hacen números y esperan para el 2022 una cosecha record de 129,8 millones de toneladas de granos, en el pueblo empobrecido la prioridad sigue siendo el hambre. 

Poniendo más que palabras, esta nochebuena, dirigentes y militantes de los movimientos porteños compartirán la cena en la Plaza Congreso y el obelisco junto a familias en situación de calle, bajo la consigna “Ninguna familia sin Navidad”. 

El acto político de compartir el pan,es un llamado de atención para el Jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y levanta las banderas de “trabajo digno, terminar con la pobreza y vivienda para todos”.

En el interior de la provincia, Guillermo Montenegro, el intendente de General Pueyrredón, debió acceder a dialogar con los habitantes de la “Mar del Plata invisible” que marcharon a la costa para instalarse durante toda la semana en la rambla del casino y el centro comercial. Es la postal menos deseada del gobierno municipal de Propuesta Republicana en la previa del verano más esperado. La demanda era de alimentos frescos y pollos. Tras varias negociaciones frustradas, finalmente se llegó a un acuerdo con el aporte municipal de un 50% más de alimentos. 

Para lograrlo fue necesario que Montenegro sintiera también la presión de la iglesia. La Mesa de Diálogo por la Dignidad de las Periferias, espacio impulsado por el Obispado de Mar del Plata, reclamó políticas concretas para disminuir la pobreza. A través de un comunicado, expresó su creciente preocupación por la situación de vulnerabilidad social en la llamada “ciudad feliz”. 

Renovamos el compromiso y levantamos la voz por aquellos hombres, mujeres, niños, niñas y jóvenes invisibilizados en nuestra ciudad. Alzamos la voz nuevamente por aquellos miembros de nuestra ciudad que buscan subsistir y sostener a sus familias trabajando en el predio de residuos de nuestra ciudad. Un espacio que supo tener un plan para lograr una adecuada gestión de residuos y que actualmente se ha convertido en un lugar donde todos los días se vulnera la dignidad de las personas que se ven atravesadas por diversas violencias”, expresaron en un comunicado que se hizo público mientras los piquetes se intensificaban. 

En Tandil las acciones pasan por los pedidos solidarios, la organización comunitaria y una marcha reclamando justicia por el asesinato de un joven. El comedor y Merendero Refugio, impulsó una campaña solidaria con los demás comedores de la ciudad porque “hay familias que necesitan ayuda para que no falte en esta noche buena un pan dulce o algo para cenar”. 

Desde la UTEP Evita, se optó por realizar una feria para dar la posibilidad de que los tandilenses les compren a los productores populares que comercializan directamente sus productos agroecológicos en la fábrica recuperada Ronicevi. Esta es una manera de movilizar desde un lugar distinto apostando a la organización y la economía popular en una ciudad en la que se acaban de autorizar las fumigaciones con agrotóxicos cerca de cursos de agua, viviendas y escuelas.

Desde el gobierno municipal que encabeza el radical Miguel Ángel Lunghi, se hace poco y nada para revertir la situación social. Ante las movilizaciones populares, el referente del partido Acción Tandilense, Gonzalo Santamarina, reclamó en sus redes sociales “ un nuevo pacto de convivencia”. 

La mirada del jefe del partido vecinalista, que consiguió 7 mil votos en la última elección, apunta a Graciela Altamirano, la líder del movimiento “1ro. De Octubre” que viene sosteniendo el pedido de justicia por la muerte del joven Sebastián Simón, que murió atropellado y abandonado por Luciano Jaureguiber, exfuncionario lunghista que en un primer momento utilizó sus influencias para “tapar” el hecho. 

Santamarina quiere criminalizar la protesta social, sosteniendo: “Llegó el momento de que todas las instituciones nos pronunciemos categóricamente, sin temor y sin especulaciones, declarando, en el marco de los acuerdos del Bicentenario de Tandil, las prácticas de Griselda Altamirano, no gratas, en nuestra ciudad”. 

Santamarina afirma: “Nuestra comunidad tandilense es por definición una sociedad pacífica, trabajadora, respetuosa de la Ley, defensora de las instituciones democráticas, donde el progreso se alcanza a través del esfuerzo, el sacrificio, la educación, la cultura del trabajo, y el apoyo a quienes producen y emprenden”.

Esta Navidad, la familia de Sebastián y el movimiento al que el joven pertenecía seguirán preparando la caminata hasta La Plata, para manifestarse en Casación, reclamando que los jueces ratifiquen la orden de prisión que ya confirmaron la Jueza de Garantías y la Cámara de Apelaciones de Azul, aunque Jaureguiber sigue en libertad. 

Aunque el hambre cero  y la plena inclusión sigan siendo una utopía, desde Bahía Blanca llegan noticias alentadoras: “El porcentaje de bahienses que tiene una ocupación cerró en el 43,9 % en el tercer trimestre de 2021, tras desplomarse hasta el 39,9 % hace un año atrás producto de los efectos del aislamiento”, reveló un estudio realizado por el  Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales del Sur, dependiente del Conicet y la Universidad Nacional del Sur (UNS), elaborado por Valentina Viego y Gustavo Burachik.

Desde los gobiernos nacional y provincial los esfuerzos por una Navidad más igualitaria se multiplicaron y van desde la producción de 2 millones de pan dulce solidario por 100 pesos, en convenio con los panaderos de Avellaneda hasta el bono de fin de año de la ANSES, pasando por el refuerzo de $ 8.000 destinado a los sectores más vulnerables dispuesto por el gobernador Axel Kicillof. 

A modo de ejemplo el bono de hasta ocho mil pesos para jubilados y pensionados que cobran la mínima, anunciado por el presidente Alberto Fernández, beneficia en Tandil a 14.373 vecinos entre jubilados que cobran la mínima, beneficiarios de la Pensión Universal para el Adulto Mayor; pensiones no contributivas por vejez, invalidez, madres de siete hijos o más; y demás pensiones no contributivas. Sin embargo, en la macro economía que hoy gobierna al mundo, ningún esfuerzo es suficiente. 

Cada vez hay más pobres y menos ricos más ricos. Los Curas en Opción por los Pobres proponen este 24 de diciembre una reflexión más profunda: “No será feliz nuestra Navidad con presos y presas políticas, ni con hermanos y hermanas indígenas atropellados y atropelladas en sus derechos, ni con hermanos y hermanas en situación de calle, sin tierra, ni techo, ni comida, ni trabajo; ni con un país cuyo futuro esté condenado a muerte por la avaricia de empresarios que no miran otra cosa que su renta o por la exigencia de pagar la deuda con el FMI. No será feliz la Navidad con multimedios de comunicación que, mientras reciben suculenta pauta publicitaria oficial, se encargan de demoler todo signo de esperanza. No será feliz la Navidad si un minúsculo grupo de los más ricos de la patria persisten en negarse a aportar una ínfima parte de sus bienes para aliviar apenas un poco los dolores de tantas y tantos. No será feliz la Navidad mientras sigamos velando a víctimas de ‘gatillo fácil o de femicidio en nuestros barrios. No será feliz la navidad sin una urgente y necesaria reforma del poder judicial, tan lento hoy para juzgar a los poderosos y tan veloz en condenar a los y las pobres“. 

Como dice el Luis de León Gieco: “Mi vida no es de navidad”. Es la consecuencia de las acciones políticas que ejecutan los que gobiernan cuando son insensibles a las necesidades del pueblo y endeudan al estado importándoles solo sus bolsillos.  “El pueblo estará de fiesta y no habrá tristezas” sólo cuando la inclusión social sea una realidad y no haya argentinas y argentinos sumergidos en la pobreza. 

https://politicaymedios.com.ar/nota/17463/la-navidad-de-luis-nbsp/

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