El presidente Alberto Fernández quiere adquirir la inoculación desarrollada por Cuba. Hasta el momento, Irán realizó un ensayo a gran escala con 100 mil dosis de Soberana y Venezuela recibirá 30 mil ejemplares.
El presidente argentino Alberto Fernández busca adquirir la vacuna cubana Soberana 02 mientras sigue inoculando con Sputnik V, Sinopharm, Astrazeneca y las provistas por el mecanismo Covax creado con el auspicio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para favorecer un acceso equitativo a la inmunización.
Cuba desarrolla cinco vacunas propias contra el coronavirus, dos de las cuales -Soberana 02 y Abdala- se encuentran en la tercera y última etapa de ensayos clínicos para evaluar su eficacia.
En paralelo a esos ensayos, las autoridades sanitarias han puesto en marcha estudios de intervención controlada en La Habana y la zona oriental de la isla que prevén la administración masiva de esos dos candidatos vacunales, incluyendo a 1,7 millones de personas en la capital.
En tanto, el gobierno cubano no ha adquirido vacunas en el mercado internacional ni forma parte del mecanismo Covax.
Ninguno de esos fármacos cuentan aún con autorización de uso de emergencia o registro, algo que las autoridades esperan lograr en torno al mes de junio.
Hasta el momento, Irán, país que prohibió el uso de vacunas estadounidenses y británicas, está realizando ensayos a gran escala con 100 mil dosis de Soberana 02 y podría comenzar a producir las vacunas cubanas en la República Islámica.
En tanto, Cuba anunció que enviaría 30 mil dosis de las vacunas candidatas a Venezuela y que científicos cubanos y chinos desarrollarían conjuntamente una nueva vacuna contra las variantes emergentes del coronavirus.
